Ante el aumento de robos, abusos y violaciones de los que son víctimas los migrantes centroamericanos que utilizan el tren de carga conocido como “La Bestia”, para llegar a Estados Unidos, ahora muchos de ellos prefieren viajar por zonas urbanas en autobús o camionetas de pasajeros.
Alan Emanuel Barrientos, migrante guatemalteco, dijo que “hay muchos que están viajando como le dicen aquí en camioneta, bus, combis, pero por seguridad”.
Esta es una nueva forma de viajar de los centroamericanos para evitar ser asaltados o secuestrados por bandas criminales.
Rubén Pérez, director de la Casa del Migrante de San Luis Potosí, comentó que los migrantes “han tenido que dejar el transporte del tren, primero por la violencia que se ha cernido sobre las vías y todo el contorno”.
Los migrantes ahora buscan entrar a municipios y cambiar de transporte en cada poblado para evitar ser detectados o asaltados.
Pretenden cruzar México “utilizando taxi, utilizando también transporte privado y nos llegan noticias que también hasta en Uber se andan transportando para evitar los retenes y ser detenidos por los propios de migración”, especificó Rubén Pérez.
Diariamente la casa del migrante de San Luis Potosí recibe a cientos de centroamericanos que buscan un lugar para dormir y comida, pero este año, en el primer semestre la cifra de migrantes se duplicó.
Rubén Pérez agregó que el número de migrantes que atienden asciende a los seis mil, en lo que va del año; “en relación del año pasado que fueron atendidos los prácticamente cinco mil 900, ya rebasamos esa cifra”.
Los migrantes centroamericanos huyen de sus países por problemas de inseguridad, falta de empleo y buscan llegar a Estados Unidos para encontrar una vida mejor.