El flujo de mexicanos hacia Estados Unidos se detuvo en los últimos años. No así la riqueza generada por quienes emigraron hacia allá.
El ingreso de la población de origen mexicano que trabaja en aquella nación se elevó a 563 mil millones de dólares en un año. Es una cantidad que supera el producto interno bruto (PIB) de países como Chile, Colombia o Perú, por hablar de América Latina, o de cualquiera entre Bélgica, Dinamarca, Noruega, Polonia, Austria y Suecia, si se busca entre los europeos.
En los años recientes aumentó el ingreso total de la población migrante de origen mexicano en Estados Unidos
, de acuerdo con Jesús Cervantes González, responsable del Foro de Remesas de América Latina y el Caribe en el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), que reúne a especialistas de los bancos centrales de la región.
El aumento en el ingreso generado por la población mexicana –tanto migrantes como los de origen mexicano nacidos en Estados Unidos– se ha dado aun cuando la emigración hacia aquel país disminuyó en los años recientes.
La información censal de Estados Unidos y de la encuesta American Community Survey muestran que el flujo migratorio mexicano fue intenso de 1990 a 2007. En ese periodo, apunta el especialista, 7 millones 440 mil 523 mexicanos –cifra comparable a la población de Jalisco, donde viven 7.8 millones de personas– emigraron a aquel país. No obstante, de 2008 a 2015, dicho flujo se detuvo bruscamente y en promedio fue negativo en 11 mil 905 personas por año
, añade Cervantes González, también gerente de estadísticas económicas del Cemla.
La población de origen mexicano en Estados Unidos alcanzó a finales del año pasado 35 millones 797 mil 80. De ellos, 11 millones 643 mil 298, que equivalen a 32.5 por ciento del total, son inmigrantes y el resto corresponde a los nativos estadunidenses con raíces en México, de acuerdo con las cifras citadas por el especialista.
Entre 2007, cuando alcanzó su punto máximo, y 2015, el número de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos disminuyó en 95 mil 239 personas.
La debilidad del flujo migratorio mexicano hacia Estados Unidos en el periodo de 2007 a 2015 se explica por factores como: la persistencia en los primeros años de ese periodo de una menor demanda de trabajo que afectó en mayor grado a los mexicanos migrantes, dado que dicha debilidad fue mayor en los sectores de construcción y manufacturero; el retorno compulsivo y en algunos casos voluntario a México; el sentimiento antimigrante en algunos lugares, como en Arizona, condujo a una fuerte caída en el número de migrantes; y, el fortalecimiento del control fronterizo por parte de las autoridades estadunidenses, que desalentó la migración indocumentada
, mencionó.
Para el periodo comprendido entre 2007 y 2015, la población inmigrante de origen mexicano tuvo una disminución de 153 mil 757 personas en California; de 132 mil 780 en Arizona; de 35 mil 273 en Florida; y de 31 mil 453 en Illinois.