LA HUMILLANTE HISTORIA DE LOS BRACEROS, EN LA LENTE DE LEONARD NADEL

POR EDMUNDO DERBEZ GARCIA

Debido al envío de millones de norteamericanos a los distintos frentes de la Segunda Guerra Mundial, los presidentes de Estados Unidos, Franklin Roosevelt, y de México, Manuel Avila Camacho, instituyeron en 1942 el Programa Bracero contra la escasez de mano de obra en los campos de cultivo.

Durante 22 años cientos de miles de mexicanos emigraron al vecino país para trabajar de manera temporal, pero el tránsito de los campesinos hacia el otro lado acabó en muchos de ellos con las expectativas de mejores condiciones laborales y de salario. El reconocido fotógrafo Leonard Nadel emprendió un detallado reportaje gráfico del nuevo programa en 1956, año en que alconzó la cantidad más alta en la contratación de trabajadores agrícolas mexicanos con 445 mil 197.

Algunas de sus fotografías se convirtieron en representativas de las condiciones deshumanas de los braceros mexicanos en los años cincuenta.

El origen de estas imágenes está en el informe sobre las condiciones de trabajo de los braceros que la Joint  United States-México Trade Union Comittee patrocinó en 1956.

El reporte fue llevado a cabo por el Dr. Ernesto Galarza, director de Investigación de la National Agricultural Workers Union (NAWU), formalmente conocida como la NFLU, y representante de los trabajadores del campo en Arizona, California, Florida, Louisiana y Texas.

Galarza (1905-1984), nativo de Jolcotlán, Nayarit, desde muy joven inició, en Sacramento, California, la labor en el campo y con esa experiencia destacó como activista social por los derechos civiles de estos trabajadores.

Reconociendo el poder que la fotografía proporcionarían como evidencia para su informe, Galarza contrató a Nader, quien, pagado por el Fund for the Republic, un grupo liberal antiMcCarthy, viajó a lo largo de México y el suroeste de Estados Unidos con la misión de documentar el programa bracero.

Durante su recorrido, que inició en San Mateo, Atenco, Estado de México, como un pueblo representativo proveedor de fuerza de trabajo, Nadel se enfrentó de manera constante con los abusos del programa y sintió el deber de darlos a conocer a través de sus imágenes.

En la jornada hacia el norte, el Centro de Contratación de Monterrey, situado en el Campo Militar No. 1, donde se ubica ahora  el Parque niños Héroes, era un sitio clave para convertir a los hombres en trabajadores agrícolas en los Estados Unidos.

Este lugar, al que llegó el fotógrafo el 7 de julio de 1956, no fue la excepción en cuanto al maltrato físico, emocional y financiero al que eran sometidos los braceros tras un largo viaje desde sus pueblos, los burocráticos trámites de selección y contratación y los humillantes exámenes médicos.

En esta ciudad captó la incertidumbre de los trabajadores que aguardaban hasta semanas para obtener un contrato, las largas filas bajo el sol, pero sin duda las más impactantes fueron tomadas tras el cruce de la frontera, en hidalgo, Texas, en los pequeños cuartos donde dormían hacinados y cuando desnudos eran fumigados con pesticida, reflejo de las condiciones infrahumanas en que vivían.

En la leyenda manuscrita de estas fotografías, Nadel escribió: “en la misma forma que es utilizado en el manejo de ganado, los hombres son conducidos en grupos de 100 a través de una improvisada cabina de rociado con DDT”.

Este tipo de imágenes hizo conmovedor el informe que Galarza tituló: Strangers in nour Field (Extraños en nuestro campo), calificado de “incendiario” por Alicia R. Schmidt al documentar los abusos, desorganización y efectos deshumanizadores del programa bracero debido a la falta de supervisión del gobierno de Estados Unidos.

Galarza demostró que la negligencia en la prestación de muchos de los acuerdos contractuales básicos contenidos en el Acuerdo Internacional sobre trabajadores agrícolas migratorios de 1951, que tuvo como marco legal la llamada Ley Pública 78, convirtió a los braceros en esclavos modernos. “En pleno siglo de libertades –escribió-  los braceros mexicanos son objetos de las más inhumanas explotaciones”.

Las imágenes de Nadel motivaron que activistas por los derechos humanos y las libertades civiles solicitaran la derogación del programa Bracero; si bien, no se logró este propósito, favorecieron importantes cambios.

Dado el evidente patetismo de sus fotografías, no es una sorpresa que continúen siendo utilizadas por estudiosos contemporáneos que escriben sobre el programa Bracero.

El acervo pertenece al Museo Nacional de Historia Americana del Smithsonian Institut en Washington, D.C. Cientos de estas imágenes se presentan desde 2010 por ciudades  de Estados Unidos en la exposición bilingüe itinerante “Cosecha amarga, cosecha dulce: El programa bracero, 1942-1964 .

PUBLICADO EN LA REVISTA ATISBO.

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2 thoughts on “LA HUMILLANTE HISTORIA DE LOS BRACEROS, EN LA LENTE DE LEONARD NADEL

  1. Gracias al trabajo de miles de mexicano en los campos agrícolas de Estados Unidos, en la II Guerra Mundial, no se desplomó la economía de este país. Literalemnte nuestros braceros mexicanos ganaron la guerra, el frente más importante de cualquier conflicto es la agricultura.

    LOS TRABAJADORES MEXICANOS FUERON RECLUTADOS EN NUESTRO PAÍS POR EMPRESARIOS NORTEAMERICANOS, CON EL APOYO DE SU GOBIERNO Y FUERON TRATADOS PEOR QUE ANIMALES.Como se lee en el reportaje.

    En el 2014 más de 2 millones de mexicanos han sido deportados por la Administración de Barack Obama. SE LES OLVIDA LA HISTORIA Y LA GRATITUD. Sin embargo, LOS NECESITAN.

  2. Había escuchado algo de esto por algunas personas que estuvieron en EU,en esa época pero jamás me había de estas condiciones tan inhumanas que sufrian

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